Si no tienes almendras crudas puedes usar almendras fritas, pero te aconsejo que las enjuagues antes pasándolas bajo el grifo para quitarles el exceso de sal. Por supuesto si están fritas tienes que saltarte el segundo paso de esta receta.
Cuando dore el pollo lo importante es que el aceite esté bien caliente para que el pollo se dore rápido y no tenga que estar demasiado tiempo al fuego (así no se queda el pollo seco por dentro). Por eso si usas mucho pollo o si la sartén no es muy grande lo mejor es dorar el pollo en varias tandas en vez de todo a la vez. Así evitamos que baje la temperatura del aceite y que el pollo empiece a soltar agua y a cocerse en vez de dorarse.
Si no tienes aceite de girasol puedes usar un aceite de oliva muy suave, ten en cuenta que en la comida china no se usa aceite de oliva y el sabor que aporta éste altera el resultado final de la receta.
Se usa fideos chinos de trigo con huevo, en vez de los normales (sin huevo) aunque son muy parecidos y puedes usar cualquiera de los dos para la receta. Recuerda que hay muchos tipos de fideos chinos y que no debes confundir estos fideos de trigo con los fideos de arroz ni con los fideos vermicelli celofán.
Para cocer bien los fideos chinos lo mejor es seguir las instrucciones que marca el fabricante en el paquete. Los que yo uso se cocinan del siguiente modo. Pones agua a hervir con sal y cuando esté hirviendo añade los fideos chinos y aparta la olla del fuego. Deja los fideos en el agua durante 4 minutos y luego escurre. Los fideos chinos normalmente se cuecen muy rápido así que no los dejes más tiempo del que marca el fabricante.
Una cosa importante es que los fideos chinos suelen venir en una o varias láminas formadas por un solo fideo enrollado sobre si mismo. Si añades una de estas láminas al agua conseguirás un fideo enorme muy incómodo de manejar para mezclar con los otros ingredientes y para comerlo (tendrás que estar rompiéndolo con el tenedor). Por eso te aconsejo en la receta que rompas cada lámina en varios trozos antes de meterlas en el agua hirviendo!!
Una última cosa. Hay montones de salsas de sojas, las hay más artificiales y las hay más naturales. Una salsa de soja puede resultar muy dulce y otra extremadamente salada. Por esto motivo yo te recomiendo en la receta que añadas solo un poco de soja (seguramente menos de la que necesites) y que luego pruebes y si hace falta al final rectifiques con un poco más.
La guarnición ideal para este tipo de platos siempre es arroz basmati cocido, o incluso unos fideos de arroz o noodles, ya que son un aporte sencillo al plato y la combinación siempre es deliciosa. De esta forma tendrás una comida de lo más completa, con ingredientes frescos y salteados, lo que la convierte en una receta muy sana y ligera.