CHANG WENG CHUNG TONG

La sociedad de Instrucción y Recreo Chang Weng Chung Tong fue fundada en La Habana en el año 1919. De acuerdo a las diferentes tipos de gremios que se dieron se definió como sociedad de carácter clánico o patronímica, constituyendo el apellido paterno el lazo de afiliación. A diferencia de algunas que le antecedieron en su fundación, solo va a agrupar a miembros pertenecientes a un solo apellido, reconociéndose fieles herederos espirituales de un ancestro venerado, en este caso de Chang Shan.
Según cuenta la leyenda que sustenta el origen de esta organización, Chang Shan era conocido por todos como Tai Yau, y se desempeñó como un magnífico jefe de un distrito durante la dinastía Shang en China. Luego de su sentida muerte, se convirtió en la figura más querida de la zona por sus paradigmáticas cualidades de líder y con su nombre fue bautizado el territorio. Fue precisamente este orgullo de pertenencia transformado en culto lo que ha afianzado los lazos de hermandad y dio lugar a la fundación de la asociación.
Se tiene referencia que desde su institucionalización no era conocida por este nombre sino por “La Unión de la Familia”, teniendo su sede en la calle Rayo # 113, en el actual municipio de Centro Habana. No fue hasta el año 1936 que cambia su nombre por el actual y, más tarde, justo en el año 1946, adquieren el inmueble ubicado en la calle San Nicolás 517, entre Cuchillo y Dragones, también en Centro Habana, con el objetivo de asentarse de manera permanente y contar con un espacio más amplio; sede en la que aún se les tiene el privilegio de visitar.
Fieles exponentes de expresión de la cultura china dentro de la sociedad cubana, fechas muy propias de su cultura como el advenimiento del Nuevo Año Lunar o el Día de la Claridad o Qinming, así como cada aniversario de fundación de la sociedad, son motivos de festejos para sus miembros los que han hecho partícipes también a la comunidad cubana donde está enclavada la asociación.
No fue hasta en el año 1990, e inmersos en el proceso de reanimación del Barrio chino de La Habana y a partir de las nuevas condiciones dentro del grupo como la poca membresía que la directiva de la sociedad se vio obligada a hacer cambios en el reglamento en lo relacionado con el ingreso de nuevos miembros, estableciéndose la entrada de chinos naturales y descendientes aún cuando no tuvieran el apellidos Chang que en este caso pertenecerían a la categoría de “Amigos de la Sociedad”. De igual forma recibieron la licencia comercial que ha sido determinante en la reanudación de sus actividades sociales y el autofinanciamiento. Hoy, a 90 años de su fundación, la sociedad de Instrucción y Recreo Chang Weng Chung Tong constituye un pilar fundamental en la cohesión y transmisión del legado chino en Cuba.